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quiebra voluntaria

¿Qué significa la quiebra voluntaria y cómo funciona?

Presentar una solicitud de quiebra es una decisión financiera importante que puede ayudar a las personas o empresas a gestionar una deuda insuperable. Uno de los tipos de quiebra más comunes es la quiebra voluntaria, que se produce cuando un deudor inicia el proceso presentando una petición ante el tribunal de quiebras.

Exploremos qué significa la quiebra voluntaria, cómo funciona y las distinciones entre las peticiones de quiebra voluntaria e involuntaria.

Puntos Clave

  • Definición y propósito: La quiebra voluntaria permite a los deudores tomar el control de su recuperación financiera iniciando el proceso ellos mismos, lo que proporciona un alivio inmediato de los acreedores a través de una suspensión automática.
  • Flexibilidad en la presentación: Los deudores pueden elegir entre diferentes capítulos de quiebra, como el Capítulo 7 o el Capítulo 13, según su situación financiera y sus objetivos a largo plazo.
  • Distinción con la quiebra involuntaria: A diferencia de la quiebra involuntaria, que es iniciada por los acreedores, la quiebra voluntaria ofrece a los deudores la ventaja de determinar el momento y el tipo de presentación de la quiebra.

¿Qué es la quiebra voluntaria?

La quiebra voluntaria es un proceso legal iniciado por una persona o empresa que reconoce una incapacidad para pagar las deudas. El deudor presenta voluntariamente una petición de quiebra para buscar alivio de los acreedores bajo las leyes federales de quiebra.

Esto contrasta con una petición de quiebra involuntaria, donde los acreedores obligan a un deudor a declararse en quiebra para recuperar deudas impagas.

Los tipos más comunes de quiebra voluntaria son el Capítulo 7 y el Capítulo 13 para personas y el Capítulo 11 para empresas. Cada tipo tiene requisitos, beneficios y consecuencias específicos, lo que permite a los deudores elegir la opción más adecuada para su situación.

¿Cómo funciona la quiebra voluntaria?

El proceso comienza cuando el deudor presenta una petición de quiebra voluntaria ante el tribunal de quiebras correspondiente. Este documento proporciona información detallada sobre la situación financiera del deudor, incluidos los ingresos, los gastos, los activos y las deudas.

Para las personas que buscan liquidar activos y cancelar la mayoría de las deudas, la presentación de una petición voluntaria en virtud del Capítulo 7 es una opción común.

Una vez presentada la petición, entra en vigencia una suspensión automática. Esta disposición legal detiene la mayoría de las acciones de cobro por parte de los acreedores, como embargos de salario, procedimientos de ejecución hipotecaria y llamadas de cobro. La suspensión brinda alivio inmediato al deudor mientras se desarrolla el proceso de quiebra.

Reunión con los acreedores

Después de presentar la petición, el tribunal programa una reunión de acreedores, también conocida como reunión 341. Durante esta reunión, el deudor responde preguntas bajo juramento sobre sus asuntos financieros y la petición de quiebra. Los acreedores pueden asistir y plantear inquietudes u objeciones.

Dependiendo del capítulo bajo el cual se presenta la petición, el proceso de quiebra puede implicar la liquidación de activos no exentos para pagar a los acreedores (Capítulo 7) o la creación de un plan de pago para liquidar las deudas a lo largo del tiempo (Capítulo 13).

Finalmente, una vez completado con éxito el proceso de quiebra, se cancelan las deudas elegibles, lo que significa que el deudor ya no está legalmente obligado a pagarlas. Esto proporciona un nuevo comienzo financiero, aunque ciertas deudas, como préstamos estudiantiles y manutención de los hijos, pueden no ser cancelables.

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Petición voluntaria Capítulo 7: un análisis más detallado

La presentación de una petición voluntaria bajo el Capítulo 7 suele ser una opción para personas o empresas con ingresos limitados y deudas significativas no garantizadas, como saldos de tarjetas de crédito o facturas médicas. El Capítulo 7 de la Ley de Quiebras implica la liquidación de los activos no exentos, y la distribución de los ingresos entre los acreedores. Los activos exentos, como los artículos esenciales del hogar y una parte del valor de la vivienda, suelen estar protegidos.

Para calificar para el Capítulo 7, los deudores deben pasar una prueba de medios, que evalúa sus ingresos y gastos para determinar la elegibilidad. El proceso es generalmente más rápido que otras opciones de quiebra, y suele concluir en un plazo de tres a seis meses.

Peticiones de quiebra voluntaria e involuntaria

Si bien la quiebra voluntaria la inicia el deudor, la quiebra involuntaria ocurre cuando los acreedores solicitan al tribunal que obligue a un deudor a declararse en quiebra. La quiebra involuntaria se utiliza normalmente en casos que involucran a empresas que tienen deudas importantes y se sospecha que ocultan activos o favorecen injustamente a ciertos acreedores. Es menos común en el caso de individuos.

Comprender las diferencias entre estos dos tipos de peticiones es esencial tanto para los deudores como para los acreedores. Una petición de quiebra voluntaria le brinda al deudor un mayor control sobre el momento y el tipo de quiebra presentada, mientras que una petición involuntaria se inicia sin el consentimiento del deudor y puede dar lugar a batallas legales complejas.

Solicite a S&B Legal más información sobre cómo declararse en quiebra y si es el mejor camino para usted.

Beneficios de la quiebra voluntaria

  • Alivio de la deuda: la quiebra voluntaria permite a los deudores liquidar o reorganizar las deudas, lo que ofrece un camino hacia la recuperación financiera.
  • Protección inmediata: la suspensión automática detiene las acciones de los acreedores, lo que brinda un respiro para abordar los desafíos financieros.
  • Elección del capítulo: los deudores pueden seleccionar el capítulo de quiebra más adecuado según sus circunstancias y objetivos.

Reflexiones finales

La quiebra voluntaria puede ser una herramienta valiosa para las personas y las empresas que luchan con una deuda inmanejable. Al presentar una petición de quiebra voluntaria, los deudores toman medidas proactivas para resolver las dificultades financieras y reconstruir sus vidas.

Ya sea que se trate de una petición voluntaria bajo el Capítulo 7, el Capítulo 13 u otro capítulo, comprender el proceso y buscar asesoramiento profesional es fundamental para obtener un resultado exitoso.

Si está considerando declararse en quiebra voluntaria, consulte con un abogado especializado en quiebras para explorar sus opciones y determinar el mejor curso de acción para su situación financiera. Comuníquese con S&B Legal hoy mismo para recibir una consulta gratuita.

Preguntas Frecuentes

¿La declaración de quiebra voluntaria puede afectar mi calificación crediticia de forma permanente?

Si bien la declaración de quiebra voluntaria afectará significativamente su calificación crediticia, el efecto no es permanente. Una quiebra del Capítulo 7 generalmente permanece en su informe crediticio hasta por 10 años, mientras que la del Capítulo 13 permanece por 7 años. Con el tiempo, los hábitos financieros consistentes y el uso responsable del crédito pueden ayudar a reconstruir su crédito.

¿Qué sucede si me olvido de incluir a un acreedor en mi solicitud de quiebra voluntaria?

Si no incluye a un acreedor en su solicitud de quiebra, es posible que no se cancele la deuda con ese acreedor, lo que significa que aún puede ser responsable del pago. Es fundamental proporcionar una lista completa de todos los acreedores al presentar la solicitud para evitar complicaciones.

¿Existen alternativas a la declaración de quiebra voluntaria?

Sí, las alternativas incluyen negociar directamente con los acreedores los planes de pago, buscar ayuda de una agencia de asesoría crediticia o explorar las opciones de consolidación de deuda. Estas alternativas pueden ayudar a gestionar la deuda sin recurrir a la quiebra, pero su idoneidad depende de su situación financiera.